Testimonios
Conoce los testimonios de las familias Guipuzcoanas que han participado en el plan de acogida.
Es un ejercicio de empatía y de entender otras realidades a la nuestra. Hemos ido aprendiendo y ajustándonos a la vez. Algunas veces es un esfuerzo pero muy, muy gratificante.
El vinculo que se hace es especial, y el idioma deja de ser enseguida un problema.
Me he sentido como si tuviese un nuevo hermano. Me lo he pasado muy bien con él este verano aunque a veces también nos enfadábamos.
Estamos deseando de que vuelva a casa.
Primero, fueron mi hijo y su pareja con Makcim; luego, nos animamos mi marido y yo, recién jubilados, con la ayuda de mi hija con Yana. Nos llena de vitalidad ver cómo disfruta aquí y el sentimiento de satisfacción es completo cuando vuelve junto a su familia con las pilas cargadas. Durante el año la comunicación con ella es constante.
Es una experiencia muy enriquecedora tanto para nosotros como para Yana. ¡El acogimiento “engancha”!